No se si es que el tiempo,
después de dar tantos palos manda algo bueno con luz propia,
y llegas.
Eres la excusa más bonita
que nunca ha tenido nadie
para aprender a volar.
Y te quedas al lado
acariciándome las alas,
poniéndome tiritas en las heridas,
y nos bebemos cuando tenemos sed,
y nos hacemos el amor hasta vaciarnos por dentro
y reírnos hasta recomponernos.
Porque como explicar lo de tu risa,
saber que has sufrido guerras
y tienes secuelas
pero que puedo ser capaz de hacertelas olvidar,
que puedo iluminarte el camino de vuelta cada vez que te pierdas,
que puedo volar con tan solo quedarme mirando como duermes,
como eres capaz de hacerme sentir única fuera y dentro de la cama.
Como explicar que solo sumas,
que nunca restas,
que hicimos un trato, yo te protejo de ti y tu a mi del mundo.
Que es respirarte y saber que no quiero nada más.
Que te he sentido tan dentro, que ya se como lates,
y no quiero olvidarlo nunca.
Que eres hogar, lugar y sitio donde quedarme a vivir.
Como explicar que llegas,
y crees en mi como nadie lo hizo antes,
que me rescatas del fondo y me ayudas a crecer.
Como explicar que casi nunca estoy segura de nada, pero que has llegado y desde que lo has hecho, creo en ti.
Y creo y lo sé, que no quiero empezar desde cero,
quiero empezar desde ti.